- Año: 2016
Descripción de los arquitectos. La empresa de confitería BAKE remonta sus orígenes a la famosa tradición lechera de Hokkaido. Este proyecto es la nueva tienda de panadería, encargada de la producción y venta de la marca -una tarta de queso recién horneada- en un distrito comercial de Kyoto.
Las capas de la historia japonesa siguen siendo las más profundas y aquí están totalmente intactas. La cultura local de Kyoto siempre ha atraído a muchos, pero en los últimos años, el número de visitantes en sus calles aumentó a casi el doble de la población residente. Por la naturaleza de esta afluencia, la tradición que atrae a tantos se ha ajustado, incorporando patrones de comportamiento que son más aceptables en términos internacionales.
La experimentación con este contexto, de 'deformado y reconceptualizando local' hasta el alcance global, inspiró la selección de materiales de construcción. Un impulso correlativo para una expansión en el modo de comunicación local exigía que fueran tanto relacionales como ricos en potencial.
Las tartas de queso recién horneadas en la cocina abierta ubicada en la parte posterior de la tienda, pronto se alinean y se exhiben en un mostrador construido de Lego. Este tejido arquitectónico sirve como el lenguaje compartido de la comunicación entre aquellos cuya lengua hablada puede diferir.
Su atractivo es universal e intuitivo y su atracción repercute en casi todas las generaciones. Evoca una sensación de intimidad, creando un momento que conecta a la gente con este espacio.
Al mismo tiempo, las paredes de la zona comercial emplean "Shitaji-Mado", una técnica de armazón de rejilla tradicionalmente utilizada en la construcción de casas de té japonesas.
Las especificaciones exactas de la parrilla están estrictamente regidas por el gremio respectivo de artesanos de cada localidad, sin que dos sean exactamente iguales.
A la izquierda parcialmente expuestas, estas paredes permiten a los clientes interactuar con una nueva iteración de la tradición, al mismo tiempo que alientan una interacción con el revestimiento de la pared exterior más antigua. De este modo, la tienda goza de un firme sentido de pertenencia, resonando con una reverencia por la región.
A través de este proyecto, Seki ha descubierto un nuevo significado mediante la reflexión y el aprovechamiento del potencial intrínseco de la localidad en sí.